viernes, 30 de enero de 2015

Malos hábitos en la fotografía.

Estos son los hábitos/errores más comunes que cometemos cuando vamos a hacer fotos, seamos novatos o expertos, ya que muchos de ellos se quedan como una manía o costumbre.
  • Disparar sin pensar. La fotografía digital tiene la ventaja que no nos cuesta dinero ni esfuerzo el revelado, por eso disparamos a lo loco y ya borraremos lo que no sirva. Pero esta ventaja se convierte en un inconveniente ya que disparar sin pensar ralentiza el aprendizaje, se pierde mucho tiempo en la selección y las fotos nos ocupan espacio en el disco duro, sin olvidar que una buena foto no es fruto del azar, en parte si, pero todo lleva su tiempo.
  • Descuidar la medición de la luz. Muchas veces con las prisas y con la típica frase de “ luego con el photoshop se arregla” nos olvidamos de medir la luz y de tomar las fotos con las medidas correctas. Es por esto que las fotografías nos quedan sobrexpuestas (quemadas/blancas) o subexpuestas (negras/oscuras). En ocasiones quedan fotografías creativas porque el resultado ha quedado bonito, pero hay que intentar tomar la fotografía en su correcta medición, para tener una buena imagen desde el principio y evitar horas de trabajo en el ordenador, que a veces no terminan con buenos resultados.
  • Coger la cámara réflex como si fuera una cámara compacta. Si es la primera vez que tienes una cámara réflex en tus manos, debes saber o debes evitar cogerla como una compacta. Las cámaras compactas no tienen visor y se hacen las fotos a través de la pantalla, sin embargo en las réflex se deben hacer las fotos mirando por el visor ya que evitaremos que las tomas salgan movidas y conseguiremos un mejor encuadre.
  • Disparar siempre desde el mismo ángulo. Si observamos nuestras tomas nos sorprenderemos al darnos cuenta que siempre disparamos desde la misma posición, que por naturaleza, resulta ser la más cómoda para nosotros o la de proteger nuestro equipo por miedo a que se nos estropee. Si queremos que nuestras fotos sean llamativas o que tengan más belleza debemos buscar otras posiciones aunque esto conlleve que nos tengamos que agachar, tumbar, ensuciar o arañar nuestro equipo. 
  • Paciencia. Detrás de las grandes fotografías hay grandes fotógrafos, y grandes dosis de paciencia. Es cierto que algunas de ellas se han tomado de forma accidental, pero la mayoría de ellas tienen la serenidad de mirar por el visor y esperar ese momento o instante. Otras veces las fotografías no salen a la primera y requieren tiempo y preparación. Por esto no hay que desesperarse si una fotografía no sale a la primera, hay que disparar hasta tener lo que queremos, pero sin olvidarse que dispara por disparar tampoco es la solución, se necesita tiempo de preparación.